Para mejorar tu estrategia de posicionamiento web, es fundamental prestar atención a la optimización de las imágenes que subes a tu sitio.

¿Por qué es importante?

Las imágenes de gran tamaño pueden ralentizar la carga de tu página, lo que no solo afecta negativamente la experiencia del usuario, sino que también es un factor que Google considera al evaluar tu sitio. Si tus visitantes se ven obligados a esperar demasiado, es probable que abandonen tu página en busca de alternativas más rápidas.

¿Qué se recomienda?

Lo ideal es que las imágenes no superen los 800 píxeles de ancho. Este tamaño es suficiente para mantener una buena calidad visual sin comprometer la velocidad de carga de tu sitio. Recuerda que cuanto más ligeras sean las imágenes, más rápido se cargará tu página, lo que mejorará la experiencia del usuario y, por ende, tu posicionamiento en los motores de búsqueda.

Además, evita utilizar nombres genéricos o predeterminados para tus archivos de imagen, como “DSC_233.jpg” o “imagen3.jpg”. En su lugar, opta por nombres descriptivos y relevantes que reflejen el contenido de la imagen y estén alineados con las palabras clave que deseas posicionar. Por ejemplo: “posicionamiento-web-imagenes.jpg”.

Para lograr un posicionamiento web efectivo, es crucial cumplir con la mayor cantidad de criterios que Google evalúa. Considera cada contenido que subes a tu sitio como una oportunidad para demostrar tu conocimiento; mientras más te prepares y optimices, mejores serán los resultados en tu “examen” de posicionamiento.

 

 

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